
La pandemia mundial de Covid-19 ha mostrado la debilidad del sistema sanitario que necesita con toda urgencia una ampliación de recursos humanos y materiales inaplazable.
Aún pudiendo presumir de que nuestro sistema sanitario es ejemplo para muchos países del mundo, se ha evidenciado la insuficiencia de medios de los que disponemos.
Profesionales saturados que realizan interminables jornadas de trabajo. La falta de elementos de protección les ha llevado a tener que improvisar con otros materiales totalmente inapropiados.
Aunque tarde, parece que las distintas administraciones comienzan a hacerse eco de las necesidades del sector y están empezando a escuchar sus peticiones.
En el ámbito de la Comunidad Valenciana, sería necesario contratar 6.000 trabajadores sanitarios para igualar los 14,18 profesionales por 1.000 habitantes que hay en el conjunto de España.
Desde la dirección de los hospitales no cesan en la búsqueda, sobre todo de médicos y enfermeros. Sólo por efecto de la tasa de reposición entre 2010 y 2018 se perdieron 10.000 profesionales y aún quedan 8.000 por recuperar.
Por su parte, el Sindicato de Enfermería Satse ha pedido un aumento de plazas en las Facultades de Enfermería de la provincia de Alicante para tratar de acabar con el déficit histórico de profesionales en los hospitales.
Las quejas por falta de medios también llegan de los centros de Atención Primaria. Indican que siguen sin webcams, ni auriculares para el teléfono y sin ver a rastreadores en los centros de salud.
Esperemos que pronto todas estas carencias comiencen a ser subsanadas y no tengamos que ver a nuestros profesionales sanitarios tan desbordados.
Nuestra salud y la de las personas que queremos es lo que está en juego.
Desde aquí agradecemos toda la implicación y buen hacer del personal sanitario en esta situación y siempre.